Recientemente Digicel lanzó una campaña CALCADA de la chilena WOM -empresa de telefonía que nació en 2015 en aquel país cuando Novator Partners compró Nextel y le cambió el nombre-. El problema no reside en el plagio/copia de la campaña, allá cada quién con su ética profesional; el problema es, a mi criterio, lo vacío de la propuesta de esta empresa telefónica donde no busca un cambio social, no busca ni siquiera vender más -que es el fin último de la publicidad- y solo busca figurar sin importar cómo, solo “hacer bulla”, y este es el principio más bajo, burdo y mezquino de la publicidad.
» Hace 8 años