Crean una técnica para que los difuntos se conviertan en abono
El material se convierte en un excelente fertilizante.
La bióloga química de Suecia, Susanne Wiigh-Mäsak asegura haber descubierto un método más ecológico y eficiente de dar sepultura a los difuntos: la ultracongelación por nitrógeno líquido.
Wiigh-Mäsak es la fundadora de una compañía llamada Promessa que lleva ya 15 años perfeccionando esta técnica.La técnica consiste en sumergir el cuerpo en nitrógeno líquido. El frío extremo vuelve el cadáver quebradizo, para exponerlo a vibraciones de sonido y convertirlo en milimétricos fragmentos.
El resultado de todo este proceso es algo muy parecido a la ceniza que sale de un crematorio, pero Wiigh-Mäsak asegura que, a diferencia de la ceniza, el compuesto ultracongelado no contiene agentes contaminantes como el mercurio.
Enterrado a poca profundidad, el material se convierte en un excelente fertilizante que desaparece completamente en un plazo máximo de un año.
De momento, Susanne Wiigh-Mäsak sólo ha podido demostrar su técnica con cerdos muertos. Probablemente aún quedan por superar unos cuantos prejuicios sobre la muerte antes de aceptar esta nueva solución.