Crisis en el hospital Rosales para pacientes renales

Crisis para los pacientes renales en el hospital Rosales, estos son afectados por un nuevo desabastecimiento de catéteres rígidos lo que ha provocado el que sus pacientes no se puedan realizar sus diálisis.

El día de ayer los pacientes se habrían quedado sin poder ser dializados, es la segunda vez en menos de dos meses que este suceso pasa, el 5 de mayo pasado los pacientes renales también fueron afectados, y en esa ocasión alrededor de 200 pacientes fueron afectados y no pudieron recibir sus diálisis que son de vital importancia para sus vidas.

“Realmente estamos en una situación quizá peor que la vez pasada porque no hay nada y ningún proveedor tiene en plaza”, expresó Ricardo Leiva,  quien es jefe del servicio de Nefrología.

El catéter rígido es un insumo indispensable para poder realizar las diálisis de los pacientes que llegan en un estado delicado de salud, prácticamente terminal, por el fallo renal. Cada mes el hospital recibe de 50 a 40 pacientes nuevos en estas circunstancias, esto hace que la demanda de pacientes desborde los recursos y capacidad del hospital, lo que ha obligado a que se mantengan usando los catéteres rígidos, que ya son un material obsoleto, el nefrólogo calculó que más de 500 pacientes podrían resultar afectados. 

Leiva  añadió que la raíz del problema es un error administrativo de la dirección, ya que se debió prever la necesidad del hospital y realizar las compras a tiempo “el director del Rosales, Mauricio Ventura, le va echar la culpa al proveedor, pero la culpa es administrativa por no haber previsto esto con tiempo y siempre hay problemas”, expresó.  

Cuando una persona tiene el nivel de daño renal para necesitar ser dializado, sus riñones ya son incapaces de eliminar las toxinas de su cuerpo, y el paciente ya no puede orinar y acumula líquidos, y toxinas, Leiva informó que una persona puede morir por intoxicación al acumularse sustancias delicadas, como el potasio. Las elevaciones del potasio pueden provocar un paro cardíaco.  

Las personas afectadas por la carencia son los que llegan delicados, así como los que tienen programada una diálisis peritoneal a la semana, “la diálisis semanal solo en países como el nuestro de cuarto mundo se hacen”, comentó Leiva. Además denunció que, por las condiciones laborales, dos médicos del servicio que se encargan de poner catéteres han renunciado a dos horas de su jornada.