Lo que no sabes sobre tus pesadillas
Hay ciertos detalles que ni siquiera han pasado por tu mente sobre las pesadillas que has tenido ¿o vivido? En fin, descúbrelo.
Los investigadores no saben muchos sobre las pesadillas, pero no es que no lo hayan investigado. Este tipo de sueños son personales, subjetivos y fugaces lo que significa que es muy difícil estudiarlos adecuadamente.
Pero por todo eso que los científicos desconocen sobre tus pesadillas, hay algunas cosas que sí saben y que te sorprenderán e incluso te pueden asustar.
NO SON LITERALES
Los investigadores están de acuerdo en que la mayoría de las pesadillas son causadas por ansiedad, pero raramente son una interpretación literal de lo que te está atormentando.
Un pequeño estudio, realizado por investigadores de la Universidad Tufts, documentó sueños y pesadillas luego de los ataques del 9/11 en Estados Unidos; su teoría era que los eventos habían provocado al menos algo de trauma en todos los habitantes de aquel país.
Mientras que los sujetos (ninguno de ellos afectado directamente por los ataques) reportaron un marcado incremento en sueños y pesadillas, ninguno de ellos soñó específicamente con las Torres Gemelas, los aviones o incluso con edificios altos cayéndose, a pesar de que las imágenes pasaban en la televisión todo el tiempo.
NADIE TE ESCUCHARÁ GRITAR
En las películas, la gente se revuelca y se mueve cuando están teniendo una pesadilla. Pero, en la realidad, no puedes gritar, ni moverte.
“Durante sueño de movimientos oculares rápidos (fase REM, por sus siglas en inglés) todos tus músculos están paralizados, con excepción de los músculos de tus ojos y los que usamos para respirar”, indica la doctora Aneesa Das, profesora de medicina interna con especialidad en medicina del sueño en el Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio.
Una vez que estás sentado y gritando, ya estás excitado y saliendo de esta fase de sueño, indica. Es por eso que recuerdas las pesadillas más claramente que otro tipo de sueños.
“Despiertas justo después de tener la pesadilla, así que tu recuerdo es mejor”, indica la doctora Das, a comparación de tus sueños normales, los cuales no te despiertan.
LAS PESADILLAS SIRVEN DE PRÁCTICA PARA LA VIDA REAL
Hay muchas teorías sobre por qué sueñas: algunos investigadores creen que los sueños son un reflejo de tu subconsciente, mientras que otros creen que es la manera en la que tu cerebro se mantiene ocupado mientras tu cuerpo descansa.
Sin embargo, la doctora AJ Marsden, profesora de servicios humanos y psicología en el Colegio Beacon, en Leesburg, Florida, asegura que los investigadores creen que los sueños son la manera de tu cerebro de resolver problemas o lidiar con emociones intensas.
“Una pesadilla puede ser la forma en la que nuestro cerebro nos está preparando para una situación particularmente alarmante”, indica.
Tener sueños atemorizantes sobre alguien que entra a tu casa puede ser tu mente ya sea tratando de prepárate para lidiar con esta situación, o ayudándote a sentir menos miedo.
PUEDES CONTROLAR TUS PESADILLAS
Pero necesitarás mucha práctica. El “sueño lúcido” es cuando sabes que estás soñando y puedes controlar la dirección del sueño.
“Algunas personas pueden comenzar a controlar sus sueños, pero tan pronto como se dan cuenta que están soñando, se despiertan”, explica Marsden.
Los investigadores están comenzando a usar esta técnica para ayudar a las personas con trastorno por estrés postraumático, quienes sufren frecuentemente de pesadillas. “La idea es que al enseñarles a controlar sus pesadillas, puedan empezar a resolver sus traumas,” explica la doctora Das.
HAY ALGO MÁS ATERRADOR QUE LAS PESADILLAS
Los terrores nocturnos, poco comunes en adultos, son probablemente más aterradores para los padres que para los niños que los padecen. Para empezar, puede que encuentres al niño gritando, usualmente con los ojos totalmente abiertos.
A diferencia de las pesadillas, no puedes despertar a tu hijo durante un terror nocturno, explica Marsden. Los niños pueden recordar las pesadillas aterradores, pero no tendrán ni idea de los terrores nocturnos al despertar.
Mientras que la mayoría de los sueños ocurren durante la fase REM, los terrores nocturnos suceden durante la etapa 4 del sueño, la más profunda de todas. Marsden indica que estos pueden ocurrir debido a que los niños tienen dificultades en pasar de esta etapa a la fase REM.
Pero por todo eso que los científicos desconocen sobre tus pesadillas, hay algunas cosas que sí saben y que te sorprenderán e incluso te pueden asustar.
NO SON LITERALES
Los investigadores están de acuerdo en que la mayoría de las pesadillas son causadas por ansiedad, pero raramente son una interpretación literal de lo que te está atormentando.
Un pequeño estudio, realizado por investigadores de la Universidad Tufts, documentó sueños y pesadillas luego de los ataques del 9/11 en Estados Unidos; su teoría era que los eventos habían provocado al menos algo de trauma en todos los habitantes de aquel país.
Mientras que los sujetos (ninguno de ellos afectado directamente por los ataques) reportaron un marcado incremento en sueños y pesadillas, ninguno de ellos soñó específicamente con las Torres Gemelas, los aviones o incluso con edificios altos cayéndose, a pesar de que las imágenes pasaban en la televisión todo el tiempo.
NADIE TE ESCUCHARÁ GRITAR
En las películas, la gente se revuelca y se mueve cuando están teniendo una pesadilla. Pero, en la realidad, no puedes gritar, ni moverte.
“Durante sueño de movimientos oculares rápidos (fase REM, por sus siglas en inglés) todos tus músculos están paralizados, con excepción de los músculos de tus ojos y los que usamos para respirar”, indica la doctora Aneesa Das, profesora de medicina interna con especialidad en medicina del sueño en el Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio.
Una vez que estás sentado y gritando, ya estás excitado y saliendo de esta fase de sueño, indica. Es por eso que recuerdas las pesadillas más claramente que otro tipo de sueños.
“Despiertas justo después de tener la pesadilla, así que tu recuerdo es mejor”, indica la doctora Das, a comparación de tus sueños normales, los cuales no te despiertan.
LAS PESADILLAS SIRVEN DE PRÁCTICA PARA LA VIDA REAL
Hay muchas teorías sobre por qué sueñas: algunos investigadores creen que los sueños son un reflejo de tu subconsciente, mientras que otros creen que es la manera en la que tu cerebro se mantiene ocupado mientras tu cuerpo descansa.
Sin embargo, la doctora AJ Marsden, profesora de servicios humanos y psicología en el Colegio Beacon, en Leesburg, Florida, asegura que los investigadores creen que los sueños son la manera de tu cerebro de resolver problemas o lidiar con emociones intensas.
“Una pesadilla puede ser la forma en la que nuestro cerebro nos está preparando para una situación particularmente alarmante”, indica.
Tener sueños atemorizantes sobre alguien que entra a tu casa puede ser tu mente ya sea tratando de prepárate para lidiar con esta situación, o ayudándote a sentir menos miedo.
PUEDES CONTROLAR TUS PESADILLAS
Pero necesitarás mucha práctica. El “sueño lúcido” es cuando sabes que estás soñando y puedes controlar la dirección del sueño.
“Algunas personas pueden comenzar a controlar sus sueños, pero tan pronto como se dan cuenta que están soñando, se despiertan”, explica Marsden.
Los investigadores están comenzando a usar esta técnica para ayudar a las personas con trastorno por estrés postraumático, quienes sufren frecuentemente de pesadillas. “La idea es que al enseñarles a controlar sus pesadillas, puedan empezar a resolver sus traumas,” explica la doctora Das.
HAY ALGO MÁS ATERRADOR QUE LAS PESADILLAS
Los terrores nocturnos, poco comunes en adultos, son probablemente más aterradores para los padres que para los niños que los padecen. Para empezar, puede que encuentres al niño gritando, usualmente con los ojos totalmente abiertos.
A diferencia de las pesadillas, no puedes despertar a tu hijo durante un terror nocturno, explica Marsden. Los niños pueden recordar las pesadillas aterradores, pero no tendrán ni idea de los terrores nocturnos al despertar.
Mientras que la mayoría de los sueños ocurren durante la fase REM, los terrores nocturnos suceden durante la etapa 4 del sueño, la más profunda de todas. Marsden indica que estos pueden ocurrir debido a que los niños tienen dificultades en pasar de esta etapa a la fase REM.